jueves, 28 de febrero de 2013

O quam luces, Roma!


O quam luces, Roma. Quam amoeno hic rides pospectu quantis ecllis antiquitatis monumentos. Sed nobilior tua gemma atque purior Christi Vicarius de quio una cive gloriaris. 

A MDCCCCLI 

¡Oh, cómo brillas, Roma! Cómo resplandeces desde aquí, con un panorama espléndido, con tantos monumentos maravillosos de antigüedad. Pero tu joya más noble y más pura es el Vicario de Cristo, del que te glorías como ciudad única.



5 comentarios: